Akamoji Kei: Sofisticación para la universidad y la oficina

Los extravagantes looks que se encuentran en el barrio Harajuku deben tener un punto de comparación. El estilo de la letra roja es la traducción literal del Akamoji-kei, una subcultura de la moda japonesa caracterizado por la sofisticación y elegancia. A pesar de no tener un origen claro se identifica desde los años 70’s en adelante, variando para acomodar las modas de cada época a las adultas jóvenes de cada generación.

Su nacimiento en las portadas

A pesar de no tener un origen claro se identifica desde los años 70’s en adelante, variando para acomodar las modas de cada época a las adultas jóvenes de cada generación. Su nombre proviene de 5 revistas que mostraban el estilo y tenían su nombre en colores rojos y rosados en sus portadas. JJ, Ray, ViVi, CanCam y la suspendida PINKY. que salen a la venta el 23 de cada mes. En un comienzo se popularizó ya que se creía que los hombres lo encontraban atractivo, pero hoy en día por el contrario se considera como empoderamiento femenino. 

¿Quiénes suelen usarlo?

A pesar de no ser un estilo muy conocido sí es uno de los más usados en el país nipón. Mujeres desde los 20 años en adelante deben adaptarse a las nuevas etapas de su vida, los últimos años de universidad, trabajos de oficina o que requieren vestir formal no quitan el estilo de las jóvenes japonesas que llevan el conservador, pero no obsoleto Akamoji.

Poder ir a una cita luego del trabajo sin tener que cambiar nada de tu vestuario es una de las premisa a la hora de elegir qué usar con este estilo, el tiempo es oro y en su ajetreada vida no hay minutos extras para cambios de ropa.

 

Más allá de los básicos

Pelo castaño o negro, ojos en tonos mate, delineador clásico, tonos nude en los labios o un vibrante rojo, esto acompañado de uñas perfectamente limadas y esmaltadas. Son pocas cosas que se mantienen en los looks Akamoji en lo largo del tiempo, al ser una tendencia que cambia tan rápido como la moda de temporada es difícil definir lo que se usa. Una transformación de prendas básicas de oficina para la temporada en colores planos o estampados simples, siempre recatada y dando toques a los viejos clásicos como vestidos de gruesas telas o chifón según el clima.

El dar un poco más es la clave, agregar accesorios únicos que den un plus al outfit, como lo podría hacer un collar, un cinturón o un sombrero. Lo versátil ayuda a que sea fácil de llevar para todo tipo de cuerpo, siempre identificando lo más optimo para la figura de cada una.

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